"Tener conciencia del propio cuerpo en función de las cosas que uno sabe y hace es sentirse vivir. Esta conciencia es una parte esencial de nuestra existencia como personas sensuales activas"
He empezado a caminar, mi espalda no puede con tanto peso. Junto con el ejercicio moderado los de casa me han animado y todos estamos a dieta, lo peor para mi , NO COMER DULCES.
Después de comer me voy caminando hasta Beniarres, me gustaría compartir con vosotros el paseo, hay 3k y 600m, veo a mi familia y me vuelvo
SALIENDO DE CASA
TOMO EL CAMINO DEL ANTIGUO FERROCARRIL ALCOY-GANDÍA
EL BENICADELL ME ACOMPAÑA CON SU PROTECCION TELÚRICA
AL LLEGAR A LA CASILLA DEL CAMINERO GIRO 90º y continúo en dirección a la montaña
LA MONTAÑA CADA VEZ MAS PROXIMA
A MI DERECHA LOS VIÑEDOS ALINEADOS ESPERAN SU PODA
LLEGO "AL BARRAC DEL PORT" UN MERENDERO CON FUENTES NATURALES
EN LA ENTRADA DEL PUEBLO TODAVÍA QUEDAN ALGUNOS PALOMARES ANTIGUOS
TODAS LAS CALLES ESTAN EMPINADAS
LA CASA DE LA CULTURA ALBERGA LA BIBLIOTECA Y LA UNIÓN MUSICAL
RECOJO A KHADISSA ELLA TAMBIEN QUIERE CAMINAR Y NOS LLEVAMOS A AISHA
LA VUELTA CON EL SOL DE RETIRADA HACE QUE LOS COLORES CAMBIEN
La vuelta a casa por el mismo camino, el sol en la cara y el frío de Febrero reconforta. Esta es la ruta, quizá algún día la cambie y veremos otras imagines .
Besos y abrazos amigos
Bien, Laura, entre olivos, por camino de tierra, junto a bancales labrados y bajo la mirada de esos altos peñascales, ya sólo te falta decirnos si has decidido hacer el paseo a solas o bien acompañada.
ResponderEliminarDices que lo haces tras la comida; no es el mejor momento del día, pero vale si a ti te lo parece. Si te sirviera mi experiencia, no vayas ni deprisa ni despacio. Son siete kilómetros, deberías hacerlo en una hora y cuarto, más o menos. Esa podría ser una meta; luego ya irías poniéndote otras. Lo del peso que no te obsesione, lo mismo con los dulces, búscate alternativas que no sean traumáticas, y disfruta según lo haces. Todo irá llegando, paso a paso… Besazos.
Ah! Y aprovecha ese banco que tienes en el jardín, sale un poco de gusto.
Ánimo, querida Laura, que sin dulces y con esas caminatas tan bonitas, te vas a quedar hecha un figurín. Y, de paso, fuerte como un roble, que el ejercicio es sanísimo.
ResponderEliminarUn gran abrazo.
¡Jopelines! (te suena de algo?) Estás editando este blog paulatinamente… Así no hay quietud, que me lo estás moviendooooooooooo!
ResponderEliminarEsa fuente tiene que estar riquísima, aunque sea febrero.
Ya te explicaré lo del video, que veo que te interesa y te conviene, para hacernos disfrutar con tus paseos.
Vaya, parece que lo de la dieta es una afición general. Pero, ojo, diete no significa no comer ni dejar de comer de lo que te gusta. También se pueden comer dulces, aunque menos. Respecto de las dietas yo pienso: si uno tiene sobrepeso, es porque tiene carburante de reserva en exceso, así que se trata de eliminarlo en parte. Bueno, pues ingiriendo unas pocas calorías menos de las que se consumen, se tiene que adelgazar. O sea, que no tienes que torturarte. Disfruta.
ResponderEliminarYo tampoco podría dejar unos dulces como los que tu sabes hacer...si me dan a elegir, prefiero estar gorda.
ResponderEliminar¡Toma ya, así se hace! La siguiente seré yo que ya le voy tomando el gusto a esto de hacer salidas cada día para hacer no importa qué. Y en cuanto el tiempo lo permita paseítos a media mañana al ritmo que marca Míguel (por cierto amigo mío ya te lo dije: cuando ella lo decida lo hará ¿lo ves?).
ResponderEliminarÁnimo hermana que en cuanto pueda me hago una escapada y me uno al plan.
Besos "per tots"
Míguel querido, pese a Camarón no voy volando, cojo un ritmo medio, no puedo decirte cuanto tardo, no llevo reloj, si hay algún labrador podando le saludo y como todos me conocen por la Enfermereta, hablan un rato conmigo.
ResponderEliminarCasi siempre voy sola, respirando y disfrutando del paseo con el sol de espaldas a la ida y a la vuelta poniendose, muy agradable porque no te ciega.
Paso por muchos riachuelos que al bajar de la montaña me susurran cosas interesantes.
Estoy animada, como muy bien: hoy ensalada variada y bacalao al pil-pil, sin la salsita ¡claro!
Besotes
Isabel, espero lucir tipo en fechas próximas, pero no es lo que me preocupa , es por mi espalda.
ResponderEliminarOtro abrazo fuerte para ti
Juan me hace gracia tu comentario porque mi Reumatólogo, que es amigo, cuando le hago comentarios sobre mi peso me dice sonriendo "no estas gorda estas asaona, potente". Los dulces son mi perdición, hemos dejado el domingo como un día libre.
ResponderEliminarNo te preocupes que no me flagelo, como sano, me he quitado algunas cosas de las que estaba abusando, y disfruto de las caminatas como tantas veces he disfrutado.
Besos mil
MªJesus me estaba pasando ¡tres pueblos!, mi pobre espalda ya no puede más, por lo demás , no tengo reparos gorda o delgada soy la misma.
ResponderEliminarSabes que te quiero hermana
¡Ay hermana como te echo de menos! a ver si esta es verdad y te pasas por aquí.
ResponderEliminarPo la mañana no paseo porque estoy mas pallá que pacá.
Abrazos con achuche y amarre
De verdad te das esos paseos?
ResponderEliminarLos mios son sumamente rutinarios y repetidos. Pero con estos paisajes me la pasaría caminando. Aunque seguro, necesitaría una cantimplora con buen vino de esos lugares. Un beso.
Laura, esto es un viaje interior, con imágenes. Es como si te hubieras puesto una cámara fotográfica en el cerebro. Tiene ese ritmo, ese no poder parar al leerlo y hacerlo correr. Y el título .... el título no tiene nada que ver con una dieta convencional, para nada.
ResponderEliminarEl dulce que no podés probar es otro, es otro el dulce que está prohibido. Y las grasas son las excrecencias de la experiencia, lo que sobra, el fleco, lo que hay que cortar porque contamina el resto. Tu caminata implica salir a pulir, a frotar, a meter tijera ... no estás hablando con tu boca, estás (como Lilith) cediendo la voz al tajo ...
¿Cuántas rutas hay adentro de esa ruta, cuántas bifurcacones, cuántos desvíos, cuántos bosques en los que te podrías perder? ¿El agua de la fuente me purificaría del pecado de no haber visto, de no haberme detenido a mirar?
No hay nada como leer una entrada de múltiples salidas ...
Gracias por esto.
Un abrazo muy fuerte.
Laura, dos cosas:
ResponderEliminar1º. No sólo necesitas desprenderte de tus grasas, te conviene descargar a tu espalda del trabajo excesivo que realiza. Te habrán dicho que bajes peso, pero también te deberían haber indicado que refuerces la musculatura. Los kilos se quitan fácilmente dejando de comer, comiendo otras cosas o suprimiendo partes de tu cuerpo, y esto no te lo aconsejo, porque ¿qué iba a ser de ti sin brazos o sin piernas, por ejemplo?
Deberías pretender fortalecer tus músculos, para lo cual el ejercicio físico es lo más adecuado. Un paseo relajado por el campo, camino de Benarrés o de la costa, te dará agilidad y soltura, pero poco más. Mentalmente te oxigenará el ánimo si mientras caminas no te centras en nada de manera obsesiva, y dejas que la mirada se explaye y la imaginación navegue libremente, con recuerdos y reflexiones. Si tu cuerpo requiere robustecer la espalda, tendrás que forzar un poco la marcha, y de ese modo también mejorarán las piernas e incluso la circulación y la digestión, y por supuesto la respiración. Cógete un relón, y márcate ritmos y etapas, y proponte ganar cada día un minuto de tiempo a ese paseo, hasta que llegues al justo, al que te conviene y en el que te encuentres cómoda, pero algo cansada. Me parece importante la distancia que recorras y el tiempo que emplees en hacerlo. Y sin fallar un día.
[Mi madre me decía: consejos doy, que para mí no tengo].
2º. Todo puede ser convertido en paradigma. Quienes hacen el camino de Santiago dicen que al mismo tiempo hacen el camino de su vida. Vale. Tal vez sea interesante hacer esa extrapolación y otras muchas que pudieran ponerse a tiro. Pero la multidisciplinariedad puede no ser eficaz en según qué cosas. Si tu paseo diario lo engordas con relaciones sociales, compañía amena y placenteras paradas, será buenísimo para tu persona, pero mucho me temo que completamente inane para tu espalda. Y es así que somos un fenomenal contradictorio: podemos mejorar en lo global, y fallar en lo concreto.
[Mi madre seguía diciendo: quien mucho abarca, poco aprieta].
(Se admiten discrepancias, por supuesto).
Pulgarcito, si estos paseos los hago cada día, cuando cambie la ruta, mostraré la nueva ruta.
ResponderEliminarHace unos años subía a la cresta del Benicadell, desde allí se ve el mar,
se marca toda la linea de la costa con sus pueblitos, las cúpulas de las Iglesias de color azul añil( como en Túnez).
Hay buen vino, pero el de Castilla mi tierra natal es mas...como te diría nada comparable.
Si algún día quieres venir , con gusto serás bienvenido.
Un abrazo fraternal.
Mariel, como conoces el alma. El paseo todo un símbolo, no necesito tanta protección celulítica, solo poner límites y gritaR ¡¡¡Basta!!! .
ResponderEliminarAlimentarme de otras dulzuras.
Algunas veces siento que he vivido mil vidas, y mil veces he bebido de esa fuente purificadora.
Besos, gracias por acompañarme un rato al paseo.
Míguel lo que pasa fuera, pasa dentro; lo que pasa arriba pasa abajo.
ResponderEliminarSomos espejos reflejando nuestra experiencias. Todo seguirá su cauce.
No se puede pasar de 0 a 10 sin que uno se rompa , todo tiene una asunción, se puede hacer de forma brusca o se puede hacer suavemente , aunque te arriesgues a ir mas lenta, he elegido la segunda opción.
No me molesta la compañía de nadie , pero el silencio recarga mis pilas, es una necesidad, oír piar, el aire, mi propia respiración, el murmullo de los riachuelos...
Besos y mas besos
Laura, qué preciosas fotos y qué hermoso paseo. Me ha gustado mucho la luz y la claridad que se advierte. También estoy contenta de que ya estés mejor, de que te animes a ese ejercicio que es del cuerpo y es del alma, el paseo con un fin, la visita de la gente que se quiere. Eres un cielo, Laura. Quítate las grasas si quieres, por tu salud, pero no pienses que serás mejor por tener menos grasas. Una mujer tiene grasa por naturaleza, y eso le hace tener las formas redondeadas de su cuerpo, que es una maravilla y un tesoro.
ResponderEliminarPreciosa entrada, Laura, me ha gustado muchísimo.
Besicos.
Gracias Clares, la verdad es que no me siento mal redondilla, pero mi espalda no puede con mi peso, tengo que liberarme de presiones, del cuerpo y también estoy luchando para que no me presionen tanto en el trabajo. De por sí soy muy responsable y la administración se aprovecha de mi, antes aguantaba pero ya no puedo mas.
ResponderEliminarEstos días es que hace un tiempo precioso, mucho frío pero una claridad increíble.
Besos
Ya ves, Laura, que yo insisto. Dices que lo de fuera es lo de dentro, y lo de arriba, lo de abajo. No siempre, y no necesariamente “todo ello”. Es posible que algunas veces no ocurra, y desde luego casi nunca “todo”.
ResponderEliminarDe medicina sé mucho menos que de otras cosas, y en absoluto domino algo que merezca la pena. Pero sí estoy convencido de que si enfermas no es porque por dentro estés enferma, y si te cae una teja al salir de casa tampoco es porque algo habrás hecho mal en algún momento.
Tengo una erupción en la piel que sale de vez en cuando, recorriendo libremente mi cuerpo sin mirar lugar visible o invisible. Tal poder cambiante alarmó a mi médica, que me envió al especialista de la piel. Yo le pregunté si podría deberse a mis berrinches y cabreos, y él respondió que hay explicaciones más sencillas, como por ejemplo, la aparición de algún bichito caprichoso con mi pellejo. Así las cosas, me recetó una pomada suave a base de cortisona, para que me diera un poquito cuando me molestara la irritación. Y así sigo. Ahora hace tiempo que no me molesta, pero cuando le parece surge el ronchón en cualquier parte: en el codo, en el pecho, en la barriga, en la pierna junto al tobillo, o mismamente en la ingle, sin avisar y porque sí. Y luego de darme guerra durante un tiempo, va y desaparece, para volver a mostrarse otra vez, pasado tal vez unos meses.
Conozco personas obesas de todos los calibres. No son felices y bondadosas por ser así, ni están rebosando satisfacción del mismo modo y para todos. Alguien puede sentirse muy a gusto consigo mismo y sin embargo haber tenido un pasado infeliz y una salud endeble. Y lo contrario, y lo perifrástico. No hay regla que cuadre y encaje, sino que se pueden dar todas las posibilidades y más.
Si tu espalda te da guerra, y te dan guerra en la administración, tendrás que atender esos frentes, y dejar de tocar la flauta, por más que sea encantadora. Lo mágico sirve para según y cómo. Si las vértebras te dicen ¡atención!, algo necesitan y reclaman. O se lo das, o seguirán chillando.
animo Laura! apretando culo y fortaleciendo abdomen y espalda, unas veces mas deprisa y otras no tanto, pues se tiene uno que recrear en los paseos, los colores, los rumores del aire y el agua, las conversaciones de los pajaros... ummm que envidia!
ResponderEliminarLaura, cómo me he emocionado y cómo he disfrutado con las fotos. Y con el paisaje. La vida tiene otro color si se cuenta bien y si se sabe mirar con la mirada justa. Me ha encantado la entrada... las fuentes fantásticas, la viña, los caminos sin asfaltar, las calles solitarias y rectilineas, el letrero de l'hort del pou...
ResponderEliminarLaura, he venido a pasear contigo, por lo que veo. La montaña, los caminos, los riachuelos, el campo... son mi vida, ni qué decir tiene que el mar también forma parte del paisaje de mi alma. (Mi padre, nació en un pueblo de Zamora, pero vivió en Salamanca, aunque siguió visitando este pueblo donde aún me queda familia. La llanura, y los toros, también me llaman).
ResponderEliminarVeo que no estamos demasiado lejos. En un pis-pas, llegaría a tu casa, acostumbrada como estoy a ir cada cierto tiempo a mis revisiones en la Unidad Pretrasplante de Pulmón de La Fe (Valencia). En realidad, no hay posibilidades, del mismo, pero la Dra.que me atiende es tan terriblemente humana y encantadora, que la invitación a que nunca pierda el contacto con el hospital, -por si las moscas-, no me resulta pesado ni desagradable.
Te he acompañado perfectamente, en tu camino, sobre todo, porque no se percibían las cuestas, ahora, bien...., al pueblo..., yo, en coche. No es por no ir, si hay que ir se va...ja,ja, ja.
Ënvidio tu vida y casa resuelta, tu paisaje que alimenta, y ese olivo que debe ser una perdición. Yo, tuve no hace mucho tiempo, un banco como el tuyo, pero tuve que abandonarlo en medio de un terremoto vital. No importa. Ahora, estoy en la "ciudad", en un piso amplio, cómodo, con vecinos soportables, y hasta agradables, y dentro de lo malo, muy contenta.
Encantada de recibirte en mi espacio, donde serás siempre bienvenida.
Abrazos para ti también. Cuídate esa espalda.
¡Ay! Miguel de mi alma ¿como podría decirte algunas cosas sin molestar?. Esto que dices es tu creencia, no la mía.
ResponderEliminarEl ser humano no está fragmentado , me explico. No hay un CUERPO que funciona por su lado y del que si todo va mal se ocupa un Médico, una MENTE por otro lado y si va mal se ocupa un PSICÓLOCO o un PSIQUIATRA dependiendo del grado de dolencia, y un ESPÍRITU de quien antes os ocupabais los curas y ahora no se sabe quien se ocupa.
El SER HUMANO se muestra íntegro y cada una de sus entidades repercute en las otras tanto en lo adecuado como en lo que no lo es, las células reciben absolutamente TODOS los mensajes tanto del cuerpo, mente y espíritu.
Así el dolor físico actúa en el cuerpo aumentando su frecuencia cardiaca, su tensión arterial, la sudación con frío, entristece a la persona y pierde su alegría de vivir, es decir afecta a todos sus entidades o cuerpos.Por tanto, cualquier suceso que acontece fuera , afecta al ser humano en todas sus entidades( igual afuera que adentro)
Socialmente podemos estar en la cumbre social ( por ejemplo en un cargo de Dirección) y pasado mañana estar sin trabajo y el ser humano seguirá siendo el mismo ser ( igual arriba que abajo)
Las lesiones de mi espalda son responsabilidad mía , porque no he aprendido a poner límites y decir No. he doblado mi espalda mucho, he trabajado mas. Quizá haya descubierto que para que las personas me quieran no tengo que trabajar tanto solo tenga que pedir . "necesito que me quieras, no por lo que hago , ni por lo que soy, solo quiereme".
Esta es solo mi creencia, no intento convencerte solo poner mi punto de vista .
Te quiero por nada o por todo que es igual.
Si Mª Jose me acuerdo de ti y aprieto bien fuerte, y disfruto, disfruto mucho con el paseo. ¿ Te acuerdas cuando Ignacio era pequeño y paseábamos todos los días?, pues es ese mismo paseo un poco mas deprisa.
ResponderEliminarBesos y abrazos , extensibles.
Pues ¡ ya sabes ! sin pensarlo Ramón, el camino está trazado; cuando quieras tienes casa donde ir y caminos para pasear.
ResponderEliminarBesos.
Lunska, hoy al volver como está chispeando, un precioso arco iris me ha acompañado y me he dicho ¡ mira ahí esta Lunska !. No me he llevado la máquina de fotos una pena.
ResponderEliminarDe esta casa a Valencia hay una 3/4 de hora, es decir que si tienes que estar localizada no hay tanta distancia. Dentro de unos quince días la floración de los almendros estará en todo su esplendor , si quieres vienes y si no iré a verte yo en el momento que me reponga de este dopaje al que me tienen sometida los señores facultativos.
Un gustazo poder hablar contigo. Besos.
¿Molestarme? ¡Imposible!
ResponderEliminarY quiéreme. Todo o nada no es lo mismo. Pero no importa. Tú, quiéreme.
Te quiero. Un abrazo, tirando a achuchón.
Hola Laura, gracias por el paseo, y las fotos, una manera muy especial de hacer dieta a tu lado.
ResponderEliminarUn saludo
Algun dia haré ese paseo, cuya descripción me ha encantado. Mediterráneo puro. Magnifica propuesta que espero compartir. Como también lo haré con un dulce de la tierra, al que no se puede renunciar de forma tan drástica. Un abrazo
ResponderEliminar¡Cuando quieras Fernando, estas en tu casa! si vienes te aseguro un postre especialidad de la casa.
ResponderEliminarUn abrazo
África bienvenida al HORT, salgo a pasear cada día, y ninguno es igual al anterior, hoy un vendaval con el que tenía que pelear para volver a casa, pero no ha podido conmigo y he llagado.
ResponderEliminarSaludos
Namasté Laura,
ResponderEliminarGracias por pasarte por mi casa y dejar tu reflexión tan sabia.
Qué paisaje tan bonito disfrutas. Caminar por esa naturaleza maravillosa, oler a tierra, verde, almendros, vid, lavanda, pinos...oler a tierra madre.. Es pura vida.
Un abrazo muy sereno
Naia
¿Como es eso de que ya no quiero venir a sentarme en tu banco? ¡Con lo agustito que se está aqui...!
ResponderEliminar:)
He tenido un fin de semana ajetreado, querida Laura, mil disculpas.
Y mil besos...!!!